El cuarto de baño es mucho más que el lugar donde hacemos nuestras necesidades. Y es que es aquí donde comenzamos el día, nos arreglamos para una cita, nos lavamos los dientes, nos relajamos tras una dura jornada laboral, nos refrescamos o calentamos bajo el grifo… En definitiva, se trata de una estancia polivalente que requiere de ciertos metros cuadrados. Sin embargo, en muchas casas estos son prácticamente inexistentes, sobre todo en los pisos de nueva construcción. De hecho, los baños suelen ser las estancias más pequeñas y oscuras de las viviendas.
Decorar un cuarto de baño pequeño resulta complicado, pero poniendo en práctica los consejos que vamos a ofrecerte a continuación podrás lograr una estancia cómoda, agradable e, incluso, relajante. Y es que no hay que olvidar que este espacio es el ideal para encontrar la paz necesaria al final del día. ¿Te gustaría acompañarnos?
Los colores más recomendables
Como bien sabes, más allá de afectar a nuestro estado de ánimo, los colores tienen mucha influencia en la percepción del espacio. Por eso, no podrás escogerlos teniendo solo en cuenta tus gustos. Así, lo mejor en estancias pequeñas es decantarse por colores claros, especialmente el blanco, que es el que más ayuda a ampliar el espacio visualmente. Este color puede estar presente en paredes, sanitarios, muebles… Eso sí, para que el baño no quede demasiado frío o aburrido te recomendamos añadir algunas pinceladas en otros tonos. Encontrarás consejos e ideas sobre la decoración del baño en este color en nuestro artículo “Fotos de baños de color blanco”.
Las piezas de mobiliario más adecuadas
Los cuartos de baño son estancias en las que se deben guardar un montón de utensilios y potingues, así que deberás contar con el mobiliario adecuado para hacerlo. En estancias pequeñas se recomiendan las piezas suspendidas, que dan amplitud visual, además de los muebles con poco fondo pero con mucha altura, ya que pueden colocarse en cualquier rincón. Además, son muy recomendables los espejos con espacio de almacenamiento. Y, como te hemos comentado antes, no debes olvidar que los muebles en colores claros te ayudarán a ampliar el espacio visualmente, sobre todo si tienen acabados lacados.
Olvídate de la bañera
A todos nos gustaría disponer de una gran bañera en la que poder tumbarnos y disfrutar del relax. Sin embargo, en los cuartos de baño pequeños esto es misión imposible. Así, la única opción viable es decantarse por una ducha, que además de permitirte ahorrar espacio, te ayudará a ahorrar agua. Por otra parte, es recomendable que escojas una mampara transparente para cubrirla, preferiblemente con mínimos perfiles. En cuanto a los grifos, es buena idea escogerlos empotrados. También puede ser buena idea optar por un inodoro suspendido. Por supuesto, deberás prescindir del bidé.
Mantén el espacio en orden
Una de las claves a la hora de decorar cuartos de baño pequeños es mantenerlos en orden. Para ello no solo deberás contar con los muebles adecuados, sino que necesitarás otro tipo de accesorios, como ganchos, que podrás colocar detrás de la puerta; toalleros plegables; cestas; cubos… Además, es importante compartimentar bien los sistemas de almacenaje.
Espejos, unos grandes aliados
Por último, debes saber que en los baños pequeños los espejos pueden cumplir una función aún más importante que la de mirarnos cuando nos estamos arreglando. Y es que estos elementos amplían el espacio visualmente, además de potenciar la luminosidad. No hay que olvidar que la luz, especialmente la natural, también nos puede ayudar a ver los espacios más grandes de lo que en realidad son, por lo que tendrás que potenciarla al máximo. En nuestro artículo “Trucos para aprovechar al máximo la luz natural” encontrarás algunos consejos interesantes. Volviendo a los espejos, es mejor escogerlos grandes y sin marcos.