Los armarios empotrados son una gran solución en casas pequeñas en las que queremos aprovechar al máximo el espacio disponible y ganar sensación de orden. Ahora bien, ¿son siempre la mejor opción de todas?
En decoración no hay normas que valgan y por eso queremos presentarte las ventajas e inconvenientes de los armarios empotrados. Son una inversión importante que conlleva realizar obras, por lo que debemos estar complemente seguros de que hemos tomado la decisión correcta.
Aprovechan mejor el espacio
Como suele ser habitual en decoración, los armarios empotrados tienen defensores y detractores. En Decorablog pensamos que todo depende de la habitación, el espacio disponible, el presupuesto y el uso que vamos a hacer de nuestro armario. Así que empezaremos enumerando las ventajas de este tipo de armarios.
Una de las ventajas más importantes de los armarios empotrados es que nos ayudan a aprovechar al máximo el espacio disponible de cualquier habitación, por pequeña que sea. Este tipo de armarios abarcan una mayor superficie que los convencionales, desde el techo hasta el suelo.
Favorecen el orden y la estética de la habitación
Al estar empotrado, este tipo de armario favorece la elegancia de la habitación, ya que se crea una mayor sensación de orden y espacio. Además, al requerir obras para su instalación, estos armarios consiguen adaptarse mucho mejor a nuestras necesidades.
Debido a su diseño especial, estos armarios se ensucian menos que los prefabricados, ya que no hay huecos entre el cuerpo del armario y las paredes, evitando así la acumulación de suciedad. Por lo que solamente tendremos que preocuparnos del interior.
Otra de sus ventajas es que se adaptan perfectamente a infinidad de estilos, ya sean ambientes modernos, clásicos… Y, además, permiten la instalación de diferentes tipos de puertas, como correderas, abatibles y plegables.
Por último, el armario empotrado nos permite una mayor organización que uno prefabricado. Su interior también puede adaptarse a las necesidades de los inquilinos del piso, con tantos estantes y cajones como queramos colocar. Pero eso sí, conviene contar con varios puntos de luz en su interior, ya que los armarios empotrados son más amplios y profundos que los convencionales.
Más caros y más difíciles de restaurar
Está claro que los armarios empotrados presentan muchas ventajas. Pero, como es habitual en interiorismo, también tienen algunos inconvenientes. El más importante es el precio, ya que este tipo de armario requiere obra, por lo que no tendremos más opción que contar con la ayuda de un profesional.
Restaurar y reparar un armario empotrado es mucho más caro que un armario prefabricado. La razón es que, al requerir obras para su instalación, también vamos a necesitar contar con la ayuda de un profesional para su reparación.
Hay que tener en cuenta también que el armario empotrado no resulta una opción tan versátil como pueden ser los armarios prefabricados. Es decir, si en el futuro queremos hacer cambios en casa o reorganizar habitaciones o redistribuir muebles, tal vez el armario empotrado no sea la mejor elección de todas.
No se pueden mover ni trasladar
Así que, teniendo en cuenta todos estos aspectos, si pensamos a largo plazo, con vistas al futuro, tal vez un armario empotrado no sea la mejor opción, ya que en una mudanza, este armario no podrá trasladarse con nosotros. Desde su instalación, el armario empotrado forma parte de la casa, por lo que si nuestra residencia no es definitiva, un armario empotrado puede ser una pérdida de dinero.
¿Ya tienes claro qué tipo de armario te conviene más?
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