Consejos para el mantenimiento del aire acondicionado


El verano ya está aquí y el aire acondicionado empieza a ser una de las piezas imprescindibles en cualquier hogar, aunque bien es cierto que con un ventilador también se puede pasar en según que regiones. Para asegurarse de que funcionan, lo mejor es apostar por un mantenimiento regular. Todas las cosas se estropean y éste electrodoméstico no iba a ser menos.

Limpiar los ventiladores de fuera. Son la puerta de salida del aire caliente, es muy importante que están muy limpios. Un profesional puede limpiar los tubos de vez en cuando para evitar roturas y atascos.

Cambiar el filtro. Los filtros deberían cambiarse al cabo de pocos meses, aunque eso es algo que prácticamente nadie hace. Se pueden limpiar de vez en cuando si no se les da mucho uso, pero es muy recomendable cambiarlos cada dos años para obtener aire más puro.

Comprobar que el condensador no está bloqueado. Hay que observar si la parte que sale al exterior tiene suficiente aire de frente como para que el funcionamiento sea normal. Hay que limpiarlo bien al finalizar cada verano.

Comprobar los niveles de gas a ser posible. Hay algunos modelos que permiten verlo fácilmente. En otros, sin embargo, se requiere de la intervención de un profesional para que revise la instalación.. Hay que comprobar si tiene fugas, pues podría ser un peligro.

Comprobar la instalación eléctrica. Igualmente es muy importante comprobar que los cables estén en perfecto estado, así como que no tire demasiado de la luz. De lo contrario, terminarás abanicándote para ahorrar.

Dónde colocar un detector de humo


El pasado martes os describimos los diferentes tipos de detectores de humo que hay en el mercado. Hoy es hora de saber dónde tienen que ir colocados para que cumplan con su objetivo. Dependiendo de las dimensiones de la vivienda o estancia, tendremos que colocar uno o varios dispositivos. Hay que tener en cuenta que algunos tienen que ser instalados sólo por profesionales.

– Sólo debes utilizar detectores de humo homologados.

– Un electricista acreditado es quien debe instalar los sistemas de alarmas conectados a la red eléctrica.

– Lo mejor es tener un detector de humor por cada 60 metros cuadrados.

– El mejor lugar para su instalación es el centro del techo, pues en las esquinas el aire se mueve menos.

– Hay que colocarlo como mínimo a 30 centímetros de cualquier artículo de decoración (cuadros, lámparas…).

– Hay que colocar detectores termovelocimétricos en la cocina para descartar falsas alarmas, pues estos no detectan humos pero sí fuertes incrementos de la temperatura en poco tiempo.

– Es bastante recomendable instalar un detector en cada dormitorio, especialmente si las puertas se cierran por la noche o si en casa hay algún fumador. Si no es así, con uno en el pasillo será más que suficiente.

– No hay que ubicarlos cerca de algunos electrodomésticos (salidas de aire acondicionado y aire caliente que pueden captar el humo) y puntos de luz de fluorescente (en caso de que sean detectores de humo fotoeléctricos).

Trucos de almacenaje y ganar espacio en el hogar


La vida en hogares reducidos o pequeños nos obliga a planificar mucho todos los rincones de nuestra cada para el almacenamiento. Disponemos de recipientes especiales para guarda todo tipo de objetos, pero tambiéncontamos con mobiliario que nos ayuda a maximizar el espacio de nuestro piso. Los que vivimos en casas con pocos metros cuadrados somos conscientes de la importancia que supone mantener todo el orden. Tampoco nos queda otro remedio, ya que el desorden hace más evidente el problema de la falta de espacio.

Los armarios son uno de los elementos fundamentales para el almacenamiento, especialmente de ropa y calzado. La organización en su interior es clave para amontonar las prendas de una forma correcta. Los organizadores para prendas y calzado nos ayudan controlar un cierto orden, siendo una pieza cada vez más indispensable en las viviendas modernas, sobre todo para los que tenemos mucha ropa y complementos.

Además un truco muy bueno es aproechar la parte superior del armario para situar cajas o maletas en las que guardar la ropa o las botas de invierno. No todo tiene que estar en el interior, pues a veces no cabe. En el resto de cajones del hogar también disponemos de espacio para colocar nuestras cosas, pudiendo tener todo clasificado de forma que cuando busquemos algo, no perdamos mucho tiempo para encontrarlo.


Las zonas de paso son otro de los puntos estratégicos que debemoms tener en cuenta, puesto que en ocasiones no los aprovechamos lo suficiente, y que nos pueden dar mucho juego. Unas simples estanterías en el pasillo o unos estantes en el recibidor pueden servirnos para colocar fotografías o recuerdos varios. Si te pones a pensar, seguro que localizas rincones muertos, como las zonas bajo la escalera, pueden convertirse en espacios perfectos para instalar un armario o unos estantes para libros.

La elección del mobiliario principal de la vivienda es muy importante, puesto que los diferentes modelos ofrecen distintas posibilidades de almacenamiento. Sin ir más lejos, podemos encontrar muebles con dobles usos, como los sofás cama, ideales para acoger a los invitados. También las mesas plegables son de gran comodidad. Mientras que para la habitación de los niños, no hay nada mejor que unas literas equipadas con un escritorio en la parte inferior.

Seguro que después de todo habrás ganado espacio…

Cómo hacer un reloj decorativo


Si tienes ganas de hacer manualidades y crear algo original, pero a la vez decorativo, te proponemos hacer un reloj colorido con un diseño único y personal para colgar en la pared. Los materiales que necesitas son: una base de madera, pinturas acrílicas de diferentes colores, pinceles, barniz en aerosol, maquinaria de reloj y unas agujas.


Pinta la base de madera en acrílico blanco y luego deja secar. Puedes recortar pieza de madera con el diseño que más te guste.


Decora los diseños elegidos con diferentes colores de acrílicos.


Barniza la pieza para un acabado más brillante y déjala secar durante varias horas.


Coloca la máquina de reloj por detrás y las agujas por delante de modo que marque la hora.

Cómo limpiar el ordenador


La tecnología está cada vez más presente en los hogares, y eso se hace notar teniendo en cuenta que en prácticamente todos hay como mínimo un ordenador. Por eso, es importante tener en cuenta su limpieza, pues rápidamente se llenan de polvo y de vez en cuando hay que limpiar todos sus componentes (teclado, altavoces, webcam, ratón, monitor…).

Monitor y periféricos

Lo primero que hay que hacer es apagar el monitor, ya que la electricidad estática nos puede dar más de un disgusto. Las pantallas LCD y TFT cuentan con un revestimiento muy sensible que puede dañarse si se limpian con productos tan abrasivos como un limpiacristales convencional o el alcohol. Por ello, lo ideal es utilizar un producto destinado a limpiar monitores o retirar el polvo con una simples toallitas humedecidas en una sustancia neutra ya preparada para este tipo de limpieza. La pelusa se puede retirar con un paño suave que no tenga felpa. Nunca hay que utilizar el papel de cocina y sí podemos recurrir a las gamuzas de microfibra.

Teclado

El teclado, sobre todo si es blanco, es uno de los componentes de un ordenador que más se ensucia. Después de apagar el ordenador, lo primero que tendremos que hacer es sujetarlo boca abajo y sacudirlo para que la pelusa y los restos de suciedad más grandes se vayan.
SEGUIR LEYENDO «Cómo limpiar el ordenador»

Trucos para limpiar de forma ecológica


La despensa de nuestro hogar está llena de productos industriales como desinfectantes, abrillantadores o ambientadores. Todos ellos parecen imprescindibles, pero lo cierto es que hay muchas alternativas ecológicas, sencillas y baratas, de modo que no tienen efectos negativos para el medio ambiente ni para la salud cuando se hace un uso excesivo de productos químicos. Agua, vinagre, papel absorbente, limón, jabón natural, son algunos de los ingredientes básicos de la limpieza casera.

Tanto el vinagre como el limón tienen un carácter ácido que combate la grasa y desinfecta al matar a muchos tipos de bacterias. El zumo de esa fruta puede ayudar a neutralizar el olor del vinagre. Lo podemos utilizar para limpiar los espejos, sacar brillo a las ventanas, eliminar el polvo de los muebles o dejar como nuevos los utensilios de metal. Los platos también se pueden limpiar con una mezcla de jabón natural, vinagre y agua.

Jabón natural se suele emplear como producto de limpieza y detergente suave. Para su uso debemos asegurarnos que está fabricado con productos naturales, aceites vegetales y grasas animales. Incluso lo podemos preparar en casa con aceite usado, agua y sosa cáustica.

El bórax es una sal mineral que funciona como limpiador eficaz, un buen desinfectante y suavizante que puede sustituir a la lejía. Los inodoros se pueden limpiar dejando actuar toda la noche una taza de bórax y media de vinagre. Este producto se debe utilizar con precaución, ya que puede ser tóxico.

El bicarbonato sódico es un abrasivo que puede eliminar la suciedad y absorber los olores. Lo podemos disolver en un poco de agua para emplearlo como desinfectante y quita la grasa. También se recomienda para limpiar porcelana, azulejos, manchas en alfombras, en la cocina o el horno. Incluso para desatascar tuberías, podemos verter una taza de vinagre y otra de bicarbonato sódico por el desagüe. Tras dejarlo unos minutos, tiramos agua hirviendo.

El alcohol de quemar tiene un alto poder limpiador, desinfecta, seca superficies de manera rápida y quita manchas de grasa o pegamento. En materiales delicados se recomienda aplicar con una bola de algodón. La glicerina es un líquido viscoso, inodoro e incoloro que sirve tanto para limpiar como de capa protectora para eliminar manchas difíciles.

La condensación en las casas


La condensación es un problema bastante frecuente en las casas. El vapor de agua se acaba filtrando y atraviesa las paredes. Por eso es importante frenar su avance, para ello es necesario instalar una barrera en la cara caliente del cerramiento. De lo contrario, la humedad se filtraría por las grietas y terminará dañando la estructura de la vivienda.

Es fundamental que el revestimiento sea completamente impermeable. Por eso exista la necesidad de colocar estas barreras continuas y tengan un espesor de 10 a 15 mm. Suelen ser láminas de aluminio que se adhieren a planchas de yeso para garantizar su estabilidad, soportando muy bien el choque del vapor de agua. Del mismo modo, en las tuberías se pueden formar condensaciones por la parte exterior, por lo que se recomienda colocar un elemento separador de protección.

Mientras que en los edificios de nueva construcción, es mucho más fácil colocar estas barreras, en viviendas ya construidas, se pueden aprovechar otros trabajos de reparación para instalar estas láminas en tabiques de escayola. Las estancias del hogar más susceptibles a la humedad son el baño y la cocina, aunque tampoco podemos descuidar las habitaciones poco ventiladas y frías.

El problema también aparece en las casas que tienen decoradas las paredes exteriores con ladrillos, un material que resistente pero que en las juntas que unen los ladrillos, con el paso del tiempo se pierde el mortero a consecuencia de su agrietamiento. Para solucionarlo, se deben de rellenar las zonas deterioradas con una paleta con punta redonda y una mezcla de mortero.

Cómo bajar la altura del techo


En ocasiones nos puede interesar bajar el techo de nuestra casa, suele ser una tarea bastante habitual en los procesos de reforma integral de una vivienda.Actualmente, no es frecuente que los inmuebles tengan una altura excesiva en los techos, ya que supone reducir la luminosidad, crear estancias menos acogedoras, mal aislamiento acústico o mayor gasto en calefacción. La solución más recomendada es construir un falso techo, cuyo armazón se monta a la altura escogida y se reviste con paneles de cartón yeso o pladur para que tenga un buen acabado.

Lo fundamental para bajar el techo es armar la estructura que soportará el falso techo, para ello es posible utilizar listones de madera o de acero galvanizado. Lo primero será medir las paredes de la habitación para determinar las dimensiones del armazón. Entonces se deberan cruzar vigas transversales y longitudinales para dar mayor consistencia al falso techo. Una tengamos las medidas y los listones preparados, se fijan en las paredes a la altura seleccionada para el nuevo techo. Es recomendable perforar la pared sin dejar mucha distancia e insertar tacos plásticos para introducir en ellos los tornillos que deberan ser largos y de un grosor medio para que penetren de forma óptima en la pared.

Cuando tengamos la estructura colocada y bien fijada a la altura deseada, es el momento de forrarla para crear el falso techo. Lo más utilizado es colocar sobre ella paneles de cartón yeso o pladur. Tarea mucho más sencilla que poner yeso tradicional, ya que es un elemento de obra seca, sin tiempo de secado. Será importante pegar o fijar de alguno modo seguro los paneles a la estructura. Sin embargo, para asegurar la durabilidad del techo, es preferible fijarlos a los listones soporte y a los travesaños con clavos de cabeza chata para que pasen más posibles. Para finalizar, se recomienda aplicar masilla para emplastecer y disimular las juntas de los tableros colocados. De este modo conseguirmos un acabado uniforme de la estructura.

Limpiar los muebles de mimbre


El mimbre, también conocido como rattan, es un material muy utilizado para la fabricación de mobiliario de exterior, empelado en jardines, patios o terrazas. Sin embargo, uno de los grandes inconvenientes reside en la enorme capacidad de acumular suciedad en las fibras trenzadas de la estructura. Para proceder a su limpieza, si el material está barnizado, lo más recomendable es utilizar una máquina de vapor. Mientras que si el acabado es natural, es conveniente pulverizar el mueble con una mezcla de agua y detergente para frotar con un cepillo de púas.

Es bastante normal que los respaldos y asientos de los muebles de mimbre se ensucien, por lo que las tareas de limpieza resultan fundamentales para mantener limpios nuestro mobiliario de exterior. Si el mimbre ha perdido brillo con el paso del tiempo, lo podemos recuperar después de limpiarlo, añadiendo al agua del aclarado el zumo de medio limón y se dejar secar al sol.

En ocasiones, una limpieza en profundidad puede que no mejore el aspecto del mueble. Debido a las inclemencias meteorológicas a las que está expuesto al aire libre, el mimbre puede tener manchas o la pintura comienza a descascarillarse. Una posible solución consiste en pintar de nuevo el mueble. Para retirar la pintura antigua o deteriorada, conviene emplear un decapante en gel. Para ello, lo ideal es emplear pinturas en spray.

Limpiar el techo antes de pintar


Lo primero que tenemos que hacer antes de pintar el techo es limpiarlo en profundidad, esa tarea previa es fundamental para que la pintura agarre, la superficie debe estar seca y sin irregularidades. Luego la clave será acertar con el color de pintura y la destreza para aplicarla. Vamos a preparar el techo de forma correcta antes de liarnos a pintar. En primer lugar, debemos localizar las partes que requieren una reparación. Lo solucionaremos con una espátula, se raspan las fisuras y los agujeros para retirar la pintura antigua o desconchada. Lo ideal para un buen acabado es utilizar un producto de relleno para sellarlos. Finalmente, se lija para nivelar la superficie. No obstante, cuando hay muchas fisuras, en lugar de aplicar sellador en cada una de ellas, es preferible nivelar la zona directamente con masilla.

Una vez tengamos la superficie completamente impecable, hay que retirar el polvo acumulado, con especial ímpetu en las esquinas y en las uniones con las paredes. Para eliminar esta suciedad, basta con cepillar el techo o pasar el aspirador. Debes saber que si el techo se localiza en la cocina, es probable que también acumule restos de grasa. Cuando el techo sea de hormigón, admite utilizar agua caliente y jabón. En ese caso, es preferible emplear un detergente compuesto por resina de pino ya que acelera el efecto limpiador.

Si el techo es de yeso o con placas similares, lo más apropiado es una limpieza en seco. En caso de que la superficie se humedezca para eliminar suciedad resistente con agua y jabón, conviene asegurarse de que está seca antes de aplicar la pintura. Es importante que desaparezca cualquier rastro de humedad antes de darle una mano de pintura. No olvides trabajar de forma segura.