Jenngala Rantang es una de esas fiambreras poco comunes, una de esas fiambreras que todos querríamos tener en casa para cuando tenemos que llevarnos comida a otra parte. Tener que comer fuera de casa es algo que muchas personas tienen que hacer varias veces a la semana por culpa del trabajo, por lo que es imprescindible que se haga en las mejores condiciones posibles.

La fiambrera tiene muchos detalles que la diferencian de las demás. Su soporte de madera da cabida a un total de 3 boles que se pueden acoplar unos a otros. Son de distintas medidas, dos de 250 ml y otro de 330 ml. No hace falta decir que son ideales para llevar un primer plato, un segundo plato y un postre, como si estuviéramos en el restaurante.

Las fiambreras están fabricadas con cerámica y madera de teca reciclada. La asa que llevan hace que sea especialmente cómodo llevarlas a cualquier parte con poco esfuerzo y sin miedo a que los boles se separen, pues estos llevan un cierre de seguridad que garantiza que no haya ningún derrame.

Para hacerte con una de ellas tendrás que desembolsar 32 euros y ponerte en contacto con la página web del fabricante.