A veces nos parece imposible que nuestras estancias estén libres de los antiestéticos cables eléctricos. Podemos intentar colocarlos a lo largo del rodapié, metidos en canaletas o por las esquinas, donde quedan más disimulados… Pero ahí siguen, y somos conscientes de ello. Para evitar este problema acaba de aparecer en el mercado un producto que me parece revolucionario: una cinta adhesiva con cables que se caracteriza por su grosor mínimo, que permite disimularlos casi por completo en cualquier superficie de la casa.
El nombre de esta novedad es Wiretape y es un producto de la firma LABS. Se puede colocar en la pared y el suelo, bajo la moqueta, la tarima… ¡Incluso bajo el papel pintado! Y también se puede pintar para disimular la instalación eléctrica al máximo.
Los packs LABS Wiretape permiten sustituir los cables tradicionales por un sistema casi invisible, que se puede instalar en prácticamente cualquier superficie de la casa o la oficina: paredes, techos, suelos… Son cables ultrafinos y planos con tan solo 0,16 mm de grosor, lo que permite que se puedan disimular en cualquier lugar. Como podéis ver en la foto de la derecha, es posible pintar el sistema con pintura plástica para que apenas se perciba en las paredes. Esto es posible gracias a su diseño en forma de lámina.
Cada pack Wiretape incluye conectores, latiguillos de 30 centímetros, cinta adhesiva de doble cara para fijar los conectores a la pared (por detrás de los aparatos a enchufar) y cable de 5 o 18 pistas que se puede cortar. Este sistema es compatible con prácticamente cualquier aparato eléctrico del mercado, ya que existe un pack independiente para cada aplicación: para sistemas de audio, vídeo, teléfono, redes de Internet, cable coaxial o instalaciones multimedia. ¡Ah! El precio del pack Wiretape es de 35 euros en adelante, y podéis encontrar más información en la página web www.scyse.com.